BOSQUEJO EXPOSITIVO: Seguros de la Bondad de Dios | Santiago 1:13-18

SEGUROS DE LA BONDAD DE DIOS.

Santiago 1:13-18

Previamente mencionamos que, en el capítulo 1, Santiago nos enseña sobre la fe verdadera y los resultados de ésta en la vida del creyente. Uno de los frutos de esta fe es que, en la hora de la prueba, nos permite estar seguros de tres cosas:

1. Seguros del propósito de Dios. vv.1-12

2. Seguros de la bondad de Dios. vv.13-18

3. Seguros de la palabra de Dios. vv.19-27

En el bosquejo anterior aprendimos sobre lo primero, que podemos estar seguros en los propósitos de Dios en medio de cualquier prueba. Ahora veamos lo segundo, los hijos de Dios que atravesamos por diversas pruebas también podemos estar seguros en la bondad de Dios. De que todo lo que Dios permite es para bien y no para mal.

1. Dios no sólo quiere otorgarnos lo mejor, él también quiere sacar y obtener lo mejor de nosotros. (v.12)
1Pe.1:6; Ro.5:1-5; 2Co.4:17.

• Esta verdad nos fortalece para soportar las pruebas con ahínco. Stg.1:12
• El soportar las pruebas nos hace verdaderamente felices: "Bienaventurado el varón"
• El soportar las pruebas nos traerá recompensas eternas: "Corona de vida"

2. La Bondad de Dios no puede traernos mal. (vv.13-15) 

• Dios no trae la tentación ni el mal a nuestras vidas. Stg.1:13a
• Dios no es tentado por el mal, por eso no puede tentar a nadie. Stg.1:13b
• Dios permite la tentación en nosotros como prueba. Stg.1:14
• El hombre es responsable por ceder a la tentación. Stg.1:15

3. La bondad de Dios solo trae lo bueno a nuestras vidas, con cada prueba. (vv.17-18)

• Dios nos da toda buena Dadiva (Regalo). Stg.1:17
• Dios nos da todo don perfecto.
• Dios nos otorga los dones de su misma presencia.
• Dios nunca dejará de ser bueno, él no cambia.
• su mayor bendición es la nueva vida que nos da y su palabra. Stg.1:18

Aplicación:

1. Dios sigue siendo bueno aun cuando nos permite pasar tiempos malos.
2. La responsabilidad de lo que hagamos en tiempos de prueba es sólo nuestra.
3. Los problemas y las presiones no son una excusa para dar lugar a nuestra carne, Dios no nos envía la tentación. Pero si permite ella en nuestras vidas para afirmar nuestro carácter.
4. Lo bueno de Dios no siempre es como lo imaginamos pero es mejor de lo que imaginamos.

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